Claudia Sheinbaum expresó su pesar por el fallecimiento del Papa Francisco, a quien calificó como un humanista que optó por la paz y los pobres.
Foto: Especial/ Claudia Sheinbaum expresó su pesar por el fallecimiento del Papa Francisco, a quien calificó como un humanista que optó por la paz y los pobres.

La presidenta de México recuerda al Pontífice como un defensor de la paz y la igualdad

La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, lamentó la muerte del Papa Francisco, ocurrida este lunes 21 de abril a los 88 años. A través de sus redes sociales, la mandataria compartió un mensaje en el que expresó su respeto y admiración por el líder de la Iglesia católica.

En sus palabras, Sheinbaum calificó al Papa como un humanista y un hombre que eligió siempre el camino de los más desfavorecidos. “Un humanista que optó por los pobres, la paz y la igualdad. Deja un gran legado de verdadero amor al prójimo”, escribió la presidenta.

"Una gran pérdida para católicos y no católicos", afirma Sheinbaum

La jefa del Ejecutivo federal aseguró que el fallecimiento representa una gran pérdida para los católicos y los que no lo son. Según su mensaje, el Papa Francisco promovió valores universales que trascendieron creencias religiosas.

Además, Sheinbaum destacó la oportunidad que tuvo de conocerlo personalmente. Durante su campaña presidencial en 2024, visitó al Papa en el Vaticano, un encuentro que, dijo, representó un “gran honor y privilegio”.

El Papa Francisco y su relación con México

A lo largo de su pontificado, el Papa Francisco mantuvo un vínculo cercano con México. En diversas ocasiones habló sobre la migración, la pobreza y los derechos humanos en la región. Por ello, sus palabras y acciones resonaron profundamente entre creyentes y líderes políticos mexicanos.

Ahora, con su partida, líderes de todo el mundo reaccionan ante su legado, incluyendo a la presidenta Sheinbaum, quien resalta su influencia incluso entre quienes no profesan la fe católica.

Legado de amor al prójimo, según Sheinbaum

La mandataria subrayó que el Papa deja un legado de verdadero amor al prójimo, no solo por sus palabras, sino por sus actos concretos. Desde su elección en 2013, Francisco promovió una Iglesia más cercana a los pobres, abierta al diálogo y enfocada en la justicia social.

Para Sheinbaum, estos principios coinciden con los valores que ella también defiende en su administración. Así, su mensaje no solo se centró en el duelo, sino también en reconocer la huella que deja el pontífice en la historia contemporánea.