Lyle y Erik Menéndez comparecieron virtualmente este viernes ante un juzgado de Los Ángeles como parte de su intento por obtener una nueva sentencia. Ambos llevan más de tres décadas en prisión por el asesinato de sus padres, José y Kitty Menéndez, ocurrido en 1989 dentro de su mansión en Beverly Hills.

Durante la audiencia, los hermanos lucieron tensos en pantalla, vestidos con el uniforme azul del centro penitenciario. La defensa busca reabrir el caso, argumentando que actuaron en defensa propia tras años de presunto abuso familiar.

Hermanos Menéndez regresan a corte en busca de nueva sentencia
Los hermanos Menéndez durante su juicio en los años 90.

Caso revive tras apoyo popular y presencia en Netflix

El mediático caso, que acaparó titulares en los años 90, recobró atención gracias a un documental y una miniserie de Netflix, que generaron simpatía hacia los acusados. Miles de personas, especialmente jóvenes, comenzaron a exigir su liberación, convencidos de que fueron víctimas de un entorno familiar abusivo.

Serie de Netflix
Foto: Netflix

Fiscalía cambia postura: se opone a la reducción de condena

Aunque la Fiscalía de Los Ángeles, bajo la administración anterior de George Gascón, mostró apertura para revisar la condena, el nuevo fiscal general, Nathan Hochman, se opone rotundamente.

"No han asumido responsabilidad", aseguró Hochman, al argumentar que los Menéndez sostuvieron su defensa con mentiras y no reconocen la gravedad de sus actos.

Foto familiar de los hermanos Menéndez
Foto familiar de los hermanos Menéndez junto a sus padres.

Audiencia tensa y con mensajes claros

Durante la audiencia, el fiscal de distrito Habib Bailan afirmó que la gestión pasada actuó con motivaciones políticas. En sus palabras: “La pregunta es si entendieron la severidad y depravación de su conducta”.

Bailan también recalcó: "Debes asumir tu responsabilidad. Si no lo haces, puedes repetir el pasado".

Mientras tanto, los hermanos intercambiaban miradas y mostraban signos visibles de nerviosismo, especialmente Erik, quien se mordía las uñas durante los alegatos de la Fiscalía.

Información: AFP