La capital yucateca vivió una jornada tranquila este martes de Carnaval, mientras miles de personas se dirigían a la comisaría de X'matkuil para participar en los festejos.
Las calles del centro lucieron semivacías, con negocios cerrados y poca actividad comercial
Sitios de esparcimiento como el parque zoológico del Centenario también cerraron sus puertas, limitando las opciones de recreación para quienes decidieron quedarse en la ciudad.
No todos se sumaron a la fiebre carnavalesca. Algunas personas aprovecharon la calma para realizar actividades pendientes, como compras en supermercados, paseos cortos o reuniones familiares.
"Preferí quedarme en casa y disfrutar el día con mi familia. A veces es bueno aprovechar la tranquilidad de la ciudad cuando todos están en X'matkuil", comentó Julia Méndez, vecina del fraccionamiento Yucalpetén.
Otros, como Carlos Herrera, optaron por salir a hacer compras sin las aglomeraciones habituales.
"Aproveché que hay menos tráfico para hacer unas diligencias. Fui al supermercado y todo estaba más despejado. En días normales es difícil encontrar estacionamiento, pero hoy no tuve problema", expresó.
Disfrute
En algunas colonias y fraccionamientos, grupos de vecinos organizaron convivencias para disfrutar el día de descanso sin salir de la ciudad.
"No queríamos ir a X'matkuil porque hay demasiada gente y se batalla con el transporte. En lugar de eso, nos reunimos en casa de un amigo para hacer una carne asada", dijo Javier Canto, residente de la colonia Alemán.
Mientras tanto, los vendedores ambulantes del centro de la ciudad reportaron ventas bajas, aunque se mostraron optimistas sobre la recuperación económica en los próximos días.
"Hoy estuvo flojo, pero ya sabemos que desde mañana las ventas mejoran porque la gente regresa a su rutina", dijo Luis Sánchez, comerciante de antojitos en una calle aledaña al Centenario.
Por otro lado, quienes decidieron acudir a X'matkuil se enfrentaron a largas filas y problemas de transporte. La carretera hacia la comisaría registró una alta afluencia de vehículos, con congestionamientos intermitentes.
Con la fiesta en su recta final, la ciudad se prepara para retomar su ritmo habitual conforme los comercios reabran y la afluencia en las calles vuelva a la normalidad. Comerciantes y empleados esperan que la actividad económica repunte en los próximos días.
