A pocos días del Carnaval, Rio de Janeiro enfrenta temperaturas extremas. Este lunes, el barrio de Guaratiba registró 44°C, la temperatura más alta desde que comenzaron las mediciones en 2014, según el sistema meteorológico Alerta Rio.
El calor sofocante llevó a las autoridades a activar el nivel 4 de alerta, el segundo más alto en la escala municipal, que obliga a implementar medidas para mitigar el impacto en la población. Entre ellas, se encuentran la habilitación de espacios climatizados y la distribución de agua en puntos estratégicos.
Daniel Soranz, secretario de Salud de Rio, advirtió que este podría ser “el verano más caluroso de los últimos años”, lo que aumenta los riesgos para la salud de la población.
Impacto del calor en la ciudad y el Carnaval
El intenso calor afecta la vida cotidiana en Rio. Durante el fin de semana, miles de personas acudieron a las playas para refrescarse, mientras que una reconocida escuela de samba canceló un ensayo en Copacabana debido a las altas temperaturas.
A pesar de ello, el alcalde Eduardo Paes descartó la cancelación de eventos del Carnaval. “Podemos pedir a la gente que se hidrate mejor, pero el Carnaval sigue en pie”, afirmó.
Mientras tanto, en las favelas, donde el concreto y la falta de vegetación agravan el calor, los residentes buscan formas de refrescarse. En Bateau Mouche, algunos usaron mangueras de agua, mientras que un periodista de AFP reportó el desmayo de un anciano por las altas temperaturas.
Récords de temperatura y efectos en la salud
No solo Rio de Janeiro enfrenta temperaturas extremas. En Sao Paulo, la ciudad más grande de América Latina, se registró una temperatura promedio de 34,2°C, la más alta de 2025.
El impacto del calor en la salud es evidente. Solo en enero, más de 3.000 personas fueron atendidas en emergencias por quemaduras solares o deshidratación, casi el doble de años anteriores.
Brasil ha experimentado eventos climáticos extremos en los últimos años, desde inundaciones hasta incendios forestales, fenómenos que muchos expertos vinculan con el cambio climático.
Las autoridades recomiendan a la población evitar la exposición prolongada al sol, mantenerse hidratados y buscar refugio en lugares frescos, especialmente en estos días de calor extremo.