El viernes, Serena Null se fundió en un abrazo con su gato Domino, quien había sobrevivido al feroz incendio en Altadena, al norte de Los Ángeles. La joven, que pensó nunca más vería a su felino, se encontró con él en la sede de la organización Pasadena Humane, que había recibido a más de 350 animales rescatados del desastre. Domino llegó al refugio con heridas en las patas y una quemadura en la nariz, pero su vida fue salvada.

"Estoy tan aliviada y tan feliz de que estuviera aquí", dijo Null entre lágrimas. Esta emotiva reunión es solo una de muchas que han tenido lugar en el refugio, que ha sido esencial para los dueños de mascotas afectados por el incendio Eaton.

El desafío sin precedentes para Pasadena Humane

El centro Pasadena Humane, conocido por su capacidad para enfrentar emergencias, recibió una cantidad abrumadora de animales tras el incendio. "Nunca tuvimos que refugiar a 350 animales de una vez en un único día", comentó Kevin McManus, de Pasadena Humane. El centro maximizó sus espacios, utilizando oficinas como refugios temporales para alojar animales de todo tipo, incluidos ponis, conejos, tortugas y hasta una guacamaya de grandes dimensiones.

El regreso a casa de las mascotas rescatadas

A medida que las llamas disminuyen y los animales son recuperados, muchos dueños vienen a buscar a sus mascotas. Más de 250 mascotas han sido devueltas a sus hogares, incluidos animales como Bombón, un perro perdido desde noviembre, que fue encontrado gracias a las redes sociales.

"Es muy duro, piensas en él todos los días, preguntándote si algún día volverá a casa", comentó Erick Rico, quien se reencontró con su perro gracias a una publicación en Instagram. "Ahora solo estoy feliz de que está de vuelta", añadió.

AFP

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *