A pesar que han habido evidentes avances en el tema de la equidad de género e igualdad entre hombres y mujeres, aún existen temas pendientes y necesarios como lo es el respeto a los derechos reproductivos y la libertad de las mujeres para elegir sobre sus cuerpos.
Esto lo evidencio la abogada feminista y activista de los derechos de las mujeres Amelia Ojeda Sosa, oradora huésped de la conmemoración del 109 Aniversario del Primer Congreso Feminista.
Durante la Sesión Solemne de Cabildo que se realizó en el Centro Cultural Olimpo para conmemorar el aniversario del inicio de la lucha feminista en Yucatán, la abogada indicó que al igual que hace 109 años, las mujeres se siguen enfrentando a los mismos prejuicios y obstáculos que son el conservadurismo y la idea de que por arriba de los derechos humanos, deben prevalecer las costumbres y tradiciones.
“Hoy quizá ya no las llamamos tradiciones, pero sí roles de género, estereotipos, mitos y tabúes que siguen impidiendo el avance de todas las mujeres”, precisó.
Hasta hoy, continuó, muchas mujeres siguen siendo juzgadas y revictimizadas cuando quieren hacer valer sus derechos a decidir sobre sus cuerpos, cómo a ejercer sus derechos reproductivos, cómo o cuándo tener hijos, formar una familia, por mencionar algunos ejemplos.
Otro problema que enfrentan ellas, dijo, es la violencia digital y aunque hay avances claros, como el que hay una presidenta de la República, hay quienes participan en áreas de la ciencia, entre otras, el sistema sigue desalentando la participación femenina en la política y en la vida pública.
“Una muestra de ello, son los constantes casos de violencia política que se ejercen sobre las mujeres que se atreven a participar y a querer tomar decisiones que beneficien a otras”, agregó.
La influencia de la religión en la equidad
De igual forma, indicó que la religión es un factor que, si bien también es un derecho, éste debe aplicarse y vivirse como un asunto privado y personal y dejarla de lado del ámbito público, pues ese un factor puede provocar que todo lo logrado hasta ahora, se convierta en un retroceso.
“Le digo a las mujeres que no se duerman en sus laureles y se distraigan con el techo de cristal, porque aún hay mucho por hacer y por luchar para seguir avanzando hacia una sociedad verdaderamente equitativa y justa para todos, independientemente de su género, ideología y religión”, subrayó.
“Hoy tenemos que pensar en esas mujeres que hace 109 años dieron los primeros pasos para lograr lo que se ha logrado hoy, el contexto en el que vivieron, en donde sus propuestas fueron consideradas transgresoras y muchas de ellas tuvieron que renunciar y detenerse. ¿Por qué hoy habríamos de detenernos ante los mismos obstáculos que hoy enfrentamos?”, añadió Amelia Ojeda Sosa.
Un legado de lucha y resistencia
Por todo lo anterior, se debe honrar la memoria de todas las mujeres que antes de “nosotras” se enfrentaron a la sociedad y los grupos de poder de su época y a quienes hoy siguen en esa lucha en pleno siglo XX, indicó.
Tras finalizar su discurso, la abogada y activista recibió un reconocimiento que le fue entregado por la alcaldesa de Mérida, Cecilia Patrón Laviada, por su trabajo que por años ha realizado en la defensa de los derechos de las mujeres en especial, de sus derechos sexuales y reproductivos.