Los pubs británicos enfrentan una inesperada crisis antes de Navidad: la escasez de cerveza Guinness, un ícono de la cerveza negra irlandesa.
Esta situación ha provocado que establecimientos como The Old Ivy House en Londres comiencen a racionar la bebida entre sus clientes.
Crecimiento de la demanda, el origen del problema
La compañía Diageo, propietaria de Guinness, reportó un incremento excepcional en la demanda durante los últimos meses.
Según Debra Crew, directora ejecutiva de la empresa, las ventas han aumentado 24% entre las mujeres, especialmente entre las generaciones más jóvenes.
Este auge en la popularidad de la cerveza negra ha sido impulsado por influencers y celebridades como Kim Kardashian, quien recientemente compartió una imagen en redes sociales sosteniendo una Guinness.
Racionamiento y medidas en los pubs
Para hacer frente a la escasez, Diageo ha limitado la cantidad de barriles que los pubs pueden adquirir. Kate Davidson, copropietaria de The Old Ivy House, recibió sólo cuatro barriles esta semana, menos de la mitad de su pedido habitual.
En respuesta, Davidson implementó una ingeniosa estrategia: tarjetas de racionamiento que obligan a los clientes a comprar otras dos bebidas antes de poder disfrutar de una Guinness. Aunque la medida tiene un toque humorístico, refleja los desafíos que enfrentan los pubs británicos.
Impacto en el mercado cervecero
Entre julio y octubre, las ventas de Guinness en Reino Unido crecieron 21%, según datos de CGA by NIQ, a pesar de una caída general en el mercado de cervezas. Este fenómeno ha generado compras de pánico, complicando aún más el suministro de barriles.
Shaun Jenkinson, de la cadena Katie O’Brien’s, reveló que sus pedidos de Guinness apenas cubren el 70% de la demanda, lo que deja a muchos clientes sin su bebida favorita durante la temporada navideña.
AFP