La desesperada búsqueda de los desaparecidos en Siria
En Siria, las familias enfrentan una dolorosa realidad: la desaparición de miles de personas durante el régimen de Bashar al Asad.
En los hospitales de Damasco, mujeres como Yasmine Chabib se aferran a la esperanza de encontrar a sus seres queridos, a pesar de la violencia que ha marcado la historia reciente del país.
Yasmine Chabib, procedente de Idlib, viajó cuatro horas hasta la capital siria para buscar a su padre y a su hermano, detenidos en 2013. Con pocas esperanzas de encontrarlos con vida, jura no irse sin sus cuerpos.
“Abran las mazmorras. Iremos nosotros mismos a buscarlos entre los cadáveres”, clama entre lágrimas.
Las escenas en el hospital son desgarradoras. Un médico pregunta a un grupo si alguien reconoce “el cuerpo número nueve”, mientras se pasan entre sí un teléfono con la foto de un cadáver.
Prisiones y hospitales, puntos de esperanza rotos
Desde hace años, Siria vive una crisis humanitaria que ha dejado miles de desaparecidos. Muchos de ellos fueron detenidos arbitrariamente y se teme que hayan muerto en condiciones inhumanas.
Los cuerpos llegan en estado deplorable a hospitales como el de Harasta, lo que demuestra la brutalidad del régimen de Asad.
Aunque las autoridades prometen reformas, la impunidad sigue prevaleciendo.
Testimonios de angustia
Khaled Hamza, un padre que ha buscado a su hijo sin éxito, sigue encontrando documentos en las prisiones que indican la presencia de detenidos. Sin embargo, el paradero de su hijo sigue siendo un misterio.
Sin embargo descubrió documentos en una prisión que contienen información sobre los detenidos. Ahora los lleva a las autoridades de la nueva policía instaurada por los islamistas de Hayat Tahrir al Sham (HTS), que controlan Damasco desde hace dos días.
“Somos millones buscando a nuestros hijos”, dice Hamza. “Solo queremos saber si están vivos o muertos”, indica.
AFP