La ciudad de Mérida vibró con el inicio de La Víspera de la Noche Blanca, un evento que marcó el arranque de dos días llenos de cultura, arte y tradición en la capital yucateca. La jornada comenzó con la Feria del Panucho en el parque de La Ermita, donde la presidenta municipal, Cecilia Patrón Laviada, cortó el listón inaugural.
La Víspera llego al sur
La edición de este año apuesta por la descentralización, llevando actividades culturales y artísticas a diversos puntos de la ciudad, como el Centro Cultural del Sur, Caucel y el Centro Municipal de Danza, ampliando el alcance del festival y fomentando la participación de más comunidades.
Noche cultural
El centro histórico se convirtió en un hervidero de actividad cultural. Restaurantes, galerías y espacios públicos se llenaron de cientos de personas ávidas de explorar la oferta artística local.
Algunos sitios decidieron montar escenarios propios, brindando un espacio para los talentos emergentes, mientras que los escenarios principales se reservan para las presentaciones estelares de este sábado, donde agrupaciones como I&I y Jenny and the Mexicats prometen encender la noche.
Asistentes como María López compartieron su emoción: “Vine con mis amigas a recorrer las galerías y probar algunos antojitos en la Feria del Panucho. Es increíble ver cómo Mérida celebra el arte y la cultura de esta manera. Mañana no me perderé los conciertos”.
Por su parte, Antonio Gutiérrez destacó la descentralización del evento: “Es la primera vez que siento que la Noche Blanca es para todos, no solo para quienes viven en el centro. Estoy planeando ir al Centro Cultural del Sur mañana para disfrutar de las actividades allá”.
La Víspera sirvió como un preámbulo para lo que será este sábado la octava edición de la Noche Blanca, considerada el máximo escaparate artístico de Mérida. Los asistentes, entusiasmados, destacaron la importancia de estos eventos para fortalecer el tejido cultural de la ciudad y generar espacios de convivencia y disfrute en comunidad.
