Un productor ganadero de la Patagonia argentina fue condenado a tres años de prisión este miércoles por daño y crueldad animal, tras ser hallado culpable por la matanza de más de un centenar de pingüinos de Magallanes ocurrida en 2021.
Ricardo La Regina recibió la sentencia el miércoles tras ser hallado culpable el 7 de noviembre de “afectar el medio ambiente y producir la muerte de pingüinos de Magallanes al realizar tareas de desmonte en su campo al norte de la reserva faunística de Punta Tombo”, según precisó la fiscalía.
Sin embargo, La Regina no irá a la cárcel, ya que, según el código penal argentino, en los casos de primera condena a prisión con pena no mayor a tres años el juez puede decidir que la aplicación de la pena se deje en suspenso, mientras la persona condenada cumpla las condiciones que se le imponen.
Un centenar de pingüinos muertos
En 2021, La Regina aplastó más de un centenar de pingüinos y al menos 175 nidos al abrir un camino rural con una retroexcavadora en un predio lindero a la reserva de Punta Tombo sobre la costa atlántica, en la provincia patagónica de Chubut, 1.400 Km al sur de Buenos Aires.
Greenpeace celebra sentencia
La organización ambiental Greenpeace, que fue querellante en la causa, celebró la sentencia y destacó que el tribunal impusiera además “estrictas reglas de conducta” para La Regina, entre ellas la prohibición de circular con vehículos de gran porte y realizar obras sin autorización en la zona, y el decomiso de la retroexcavadora utilizada en los delitos.
“El fallo no solo impone una condena ejemplar, sino que también sienta un precedente en la defensa de los ecosistemas de nuestro país”, señaló Greenpeace, al calificar el hecho como “un ecocidio”.
La fiscal María Florencia Gómez, que había solicitado cuatro años de prisión para el acusado, sostuvo que el ganadero actuó con “crueldad” y causó daños “irreversibles” a la fauna y flora del lugar cuando, con una retroexcavadora, arrolló “los huevos y pichones que se encontraban en el camino”.
La Regina dijo al inicio del juicio al canal argentino TN que su forma de proceder “no fue la correcta” pero que “no había otra salida porque el Estado estuvo ausente durante más de 10 años”, en los que él reclamó por la apertura de caminos y delimitaciones entre el campo que administra y la reserva.
La demanda fue presentada por el estado provincial, la Asociación de Abogados Ambientalistas y oenegés como Greenpeace.
Punta Tombo es un santuario natural que alberga una de las mayores colonias del planeta de pingüinos de Magallanes y es considerada “zona de reserva” de la UNESCO.
AFP