Halloween y Día de Muertos son celebraciones totalmente diferentes desde su creación, hasta hoy en día con sus transformaciones y adaptaciones generacionales
Si bien Halloween, palabra compuesta por All (todos), *Hallow’s* (santos) y *Eve* (víspera), significa “Víspera de Todos los Santos”, también es conocido como Noche de Brujas. Se celebra una noche al año, el 31 de octubre. Se acostumbra a salir a pedir dulces disfrazado. Esta festividad es de origen celta y llegó a Estados Unidos hace más de 3.000 años.
Por el contrario, el Día de Muertos nace en México, y en la época prehispánica el culto a la muerte era uno de los elementos básicos de la cultura. Cuando alguien moría, era enterrado envuelto en un petate y sus familiares organizaban una fiesta con el fin de guiarlo en su recorrido al Mictlán. De igual forma, le colocaban comida que le gustaba en vida, con la creencia de que podría llegar a sentir hambre.
Elementos de cada celebración
Halloween:
– Truco o trato: los niños salen a pedir dulces disfrazados.
-Disfraces
– Jack-o’-lantern: consiste en vaciar una calabaza, dibujar o hacer un recorte a un costado en forma de rostro y encender una vela dentro
– Encendido de hogueras
Día de Muertos:
– Altares: espacios decorados con flores de cempasúchil, papel picado, calaveritas de azúcar, pan de muerto y algún platillo que les gustaba a sus familiares y, sobre todo, la imagen de los seres amados.
-Tumbas: adornar las tumbas con flores y, muchas veces, hacer altares sobre las lápidas.
– Camino de pétalos: ayudaba a guiar a las ánimas a transitar por un buen camino tras la muerte.
En Yucatán:
Se celebra el 1 y 2 de noviembre. Esta celebración se divide en categorías: según el calendario católico, el 1 de noviembre corresponde a Todos los Santos, día dedicado a los “muertos chiquitos” o niños, y el 2 de noviembre a los Fieles Difuntos, es decir, a los adultos.
Actualidad
En la actualidad, Halloween mantiene su tradición de pedir dulces y de disfraces para los pequeños. Las fiestas se han hecho populares y, con la ayuda de la globalización, ha llegado a diversos países donde esta actividad se ha replicado.
Por otra parte, en México no es novedad que nos guste la fiesta, pero cuando se trata de honrar a nuestros difuntos estamos más que dispuestos. Esta celebración, año con año, se honra y, sobre todo, se conmemora en cada hogar con el altar para recordar a los familiares que han pasado a otra vida.
Si bien cada tradición tiene lo suyo, es importante recalcar la importancia de mantener el legado de las tradiciones