Julian Assange, fundador de WikiLeaks, habló este martes ante el Consejo de Europa en Estrasburgo. En su primera intervención pública desde su liberación en junio, declaró:
“No soy libre hoy porque el sistema funcionó, sino porque me declaré culpable de hacer periodismo”. Assange había pasado 14 años entre la embajada de Ecuador en Londres y la prisión británica de Belmarsh.
Acuerdo con Estados Unidos
La liberación de Assange fue posible gracias a un acuerdo con la justicia estadounidense, donde se declaró culpable de obtener y divulgar información de defensa nacional, incluyendo detalles sobre ejecuciones extrajudiciales y secretos de aliados. Assange subrayó que se consideró culpable únicamente de buscar y reportar información de interés público.
Un testimonio con repercusiones globales
El periodista australiano hizo un llamado para que su caso sirva como ejemplo y alertó sobre la creciente impunidad en el mundo. “El periodismo no es un crimen, es el pilar de una sociedad libre e informada”, enfatizó. Durante su intervención, denunció la autocensura y las represalias contra quienes revelan la verdad.
El Consejo de Europa, que reúne a 46 países, se prepara para debatir un informe que califica las acciones judiciales contra Assange como “desproporcionadas”. Además, el informe urge a Estados Unidos a investigar los crímenes de guerra revelados por WikiLeaks, resaltando la importancia de la libertad de prensa.
Aunque Assange es considerado por muchos como un defensor de la libertad de expresión, otros critican que la publicación de documentos sensibles pudo haber puesto en riesgo la vida de muchas personas. El presidente Joe Biden, en el pasado, lo calificó como un “terrorista de alta tecnología”, y el caso sigue generando controversia a nivel internacional.
AFP