En los últimos años, la restauración de edificios históricos y casas coloniales en el centro de Mérida ha tomado fuerza, con proyectos que buscan recuperar la esencia de la arquitectura tradicional, adaptándola a las necesidades contemporáneas.
En 1982, Mérida fue declarada Zona de Monumentos Históricos por el presidente José López Portillo, convirtiéndose en la tercera zona de monumentos más grande del país. Sin embargo, este título también implica desafíos en cuanto a la conservación y restauración de los edificios, destacó el maestro en Marketing Cultural, Juan Carlos Durán Gómez.
Estas estructuras, muchas de las cuales datan de los siglos XVIII y XIX, no solo representan un legado del pasado, sino que han encontrado nuevas funciones como viviendas, negocios y espacios culturales.
“Mérida cuenta con una riqueza arquitectónica que abarca diferentes épocas. Desde la Catedral de San Ildefonso, construida en el siglo XVI, hasta edificaciones más recientes como el Palacio de la Música, cada uno refleja una etapa en la historia de la ciudad”, explicó Durán Gómez.
Restaurar y mantener estos monumentos históricos implica permisos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), lo que puede generar tensiones entre los propietarios y las autoridades. Muchos dueños de inmuebles antiguos se ven limitados por las normativas de conservación.
“A veces compran una casa sin saber que está protegida por el INAH, lo que les impide hacer modificaciones a su gusto”, agregó Durán Gómez.
Uno de los mayores desafíos es asegurar que las restauraciones respeten la arquitectura original, lo cual no siempre sucede. El especialista mencionó que algunos propietarios, sin la asesoría adecuada, han realizado intervenciones inapropiadas, como utilizar cemento en paredes que necesitan materiales tradicionales como cal y arena.
La restauración de una casa colonial, por ejemplo, suele comenzar con un diagnóstico detallado de las condiciones del inmueble. En muchos casos, las paredes de mampostería presentan grietas, los techos de vigas de madera están deteriorados por la humedad, y los pisos de pasta se encuentran dañados por el uso, explicó.
El Palacio Cantón, uno de los edificios más emblemáticos de Mérida, se enfrenta a estos mismos retos. En entrevista con 24 HORAS Yucatán , el arquitecto Bernardo Sarvide Primo, director del Museo, resaltó la complejidad de mantener una edificación de más de un siglo.
“El clima y la humedad de Mérida dañan las estructuras, especialmente las molduras de yeso y las cubiertas de madera”, señaló Sarvide Primo.
Restaurar el Palacio Cantón requiere también la colaboración de arquitectos especializados. Además, los altos costos representan otro obstáculo.
“Este año se invertirán alrededor de cuatro millones y medio de pesos en trabajos de mantenimiento, incluyendo la impermeabilización y la conservación de las colecciones que alberga el museo”, añadió el arquitecto.
El valor del Palacio Cantón no solo radica en su diseño arquitectónico, sino en su historia. Fue la residencia del General Francisco Cantón Ramos, una figura clave de la política y economía de Yucatán en el siglo XIX. Desde 1980 funciona como el Museo Regional de Antropología, convirtiéndose en un referente cultural de la ciudad.
La recuperación de edificios históricos no se limita a su restauración. Una vez que estos inmuebles han sido rehabilitados, surge la pregunta de cómo reutilizarlos. En muchos casos, los edificios restaurados han encontrado un nuevo propósito como hoteles boutique, restaurantes, galerías de arte y viviendas. Varias de estas casas coloniales restauradas han sido adquiridas por extranjeros que buscan una residencia en Mérida. Aunque esto ha generado una demanda creciente en el mercado inmobiliario, también ha suscitado críticas por parte de algunos vecinos.
“Ya es casi imposible vivir en el centro”, lamenta Adriana Acosta, estudiante de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Autónoma de Yucatán, quien todos los días debe tomar dos autobuses para llegar a su escuela.Después de una intensa búsqueda de vivienda para alquilar, la futura arquitecta se dio por vencida, pues asegura que ninguno se encuentra por debajo de los 6 mil pesos, cantidad imposible de reunir mensualmente dada su condición de estudiante.
Casa de Montejo | Este edificio emblemático, situado en el corazón de la ciudad, fue restaurado y transformado en un museo. Es un ejemplo representativo de la arquitectura colonial del siglo XVI. |
Palacio Cantón | Esta majestuosa mansión ubicada sobre el Paseo de Montejo, fue restaurada y ahora alberga el Museo Regional de Antropología e Historia, dedicado a la cultura maya y exposiciones de arte. |
Palacio de la Música | El diseño arquitectónico del Palacio de la Música Mexicana se define como la inserción de un edificio moderno y sensible a su contexto físico de gran valor histórico. |
Rosas & Xocolate | Un edificio restaurado en el Paseo de Montejo, convertido en un hotel boutique de alto nivel que combina la arquitectura colonial con toques contemporáneos. |
Palacio de Gobierno | El Palacio que actualmente alberga las oficinas del Gobierno del Estado fue construido en el mismo sitio donde estuvieron las antiguas “Casas Reales” en tiempos de la Colonia, que hospedaba a los gobernantes yucatecos. |