La Secretaría de Salud de Quintana Roo (Sesa) ha confirmado un nuevo caso de viruela símica en el estado, elevando la cifra total a ocho en lo que va del año.
Con esta actualización, México registra un total de 53 casos, según datos oficiales.
Flavio Carlos Rosado, titular de la Sesa, informó que se están coordinando esfuerzos con el Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (InDRE) y la Secretaría de Salud federal para atender la situación.
Distribución de casos y medidas preventivas
El secretario Carlos Rosado destacó que, de los ocho casos confirmados en Quintana Roo, siete corresponden a hombres y uno a mujeres. A nivel nacional, 51 de los 53 casos reportados son en hombres.
Comparando con el año anterior, Quintana Roo tuvo 47 casos en 2023, mientras que en 2024 hasta el mes de agosto se han registrado 8 casos.
Rosado subrayó que, pese a la disminución, se mantienen todos los protocolos sanitarios vigentes.
Coordinación regional y protocolos hospitalarios
El Laboratorio Estatal de Salud de Quintana Roo, que también recibe muestras de Campeche y Tabasco, ha jugado un papel crucial en el diagnóstico de la viruela símica.
El secretario afirmó que todos los hospitales en el estado están preparados para seguir el protocolo establecido.
Además, llamó a la ciudadanía a acudir a un centro de salud o hospital ante la aparición de síntomas como fiebre o ronchas, para la realización de pruebas y aplicación de protocolos.
Importancia del aislamiento y seguridad sanitaria
Rosado enfatizó la necesidad de aislamiento para prevenir la propagación del virus. Además, destacó la coordinación interinstitucional con el sector turístico, dado el rol de Quintana Roo como un destino clave a nivel internacional. Aseguró que la vigilancia sobre los casos confirmados es constante y transparente.
Síntomas y tratamiento de la viruela símica
Entre los síntomas más comunes de la viruela símica o Mpox se encuentran fiebre, sarpullido en la piel, hinchazón de los ganglios linfáticos, dolor de cabeza, dolores musculares y cansancio.
Las personas en riesgo son aquellas que han tenido contacto físico estrecho o íntimo con alguien que presenta síntomas o erupciones.
Los síntomas suelen aparecer después de dos semanas y durar entre dos y cuatro semanas.
El diagnóstico se realiza mediante muestras de hisopado de las lesiones cutáneas.
Aunque no existe un tratamiento específico ni una vacuna disponible de manera amplia, se recomienda mantener al paciente hidratado, controlar la temperatura y el dolor, y evitar manipular las lesiones.