La presidenta del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), Mónica Soto, indicó que la llegada de Claudia Sheinbaum a la Presidencia de México significa “quitar el velo al patriarcado” y “romper el techo de cristal”.
Durante la sesión solemne en la que se le entregó la constancia de presidenta electa a la ganadora de las pasadas elecciones, Soto destacó que después de 200 años y 65 hombres, por primera vez una mujer asumirá el cargo de titular del Ejecutivo federal.
“Doctora Claudia Sheinbaum Pardo, me honra ser la primera voz que se dirige a usted de forma oficial como Presidenta Electa de los Estados Unidos Mexicanos. En representación de mis pares le expreso que este Tribunal Electoral guarda para usted un profundo respeto y reconocimiento por su logro en las urnas, por haber obtenido el mayor número de sufragios entre las candidaturas contendientes, la más alta votación en la historia electoral de nuestro país, además de reunir los requisitos de elegibilidad en una elección democrática, legal y con integridad electoral”, dijo la presidenta del Tribunal Electoral a la mandataria electa.
Abundó que “con su llegada a la titularidad del Poder Ejecutivo México le quita el velo al patriarcado. Nunca más la duda que si una mujer estará preparada para gobernar nuestro país. Se eligió democráticamente a la primera Presidenta de México y con ello este capítulo se inscribe en la historia no solo de nuestro país, sino de la lucha feminista global”.
Indicó que el Tribunal Electoral, aunque durante la mayoría del proceso tuvo una integración incompleta, escuchó a todos los actores políticos y las resoluciones se dieron con transparencia, además de que “el cómputo final y la revisión de los requisitos de validez de la elección y la declaración de Presidenta electa fue una labor que se realizó, también por unanimidad y brindó certeza jurídica como corolario de la fiesta democrática que representó el 2 de junio”.
La presidente del TEPJF aseveró que otra de las lecciones del proceso electoral fue la violencia y polarización que, dijo, “laceran la democracia y las libertades”.
Consideró que “el no a la violencia es determinante y debe ser absoluto; por ello, la rechazamos categóricamente hacia cualquier persona, candidatura y particularmente, hacia los grupos en situación de vulnerabilidad, como las mujeres”.
Mónica Soto mencionó a los candidatos que fueron asesinados en las pasadas elecciones al reconocer “a las voces que muy desafortunadamente fueron calladas de manera violenta durante el proceso electoral”.
La presidenta del Tribunal Electoral resaltó que se sortearon las presiones externas y dijo que se “atendió a los actores políticos, a los partidos, a la ciudadanía, a las candidaturas, con todos los procedimientos judiciales idóneos que protegieron sus derechos fundamentales, pero también ante el acecho defendimos su autonomía e independencia de forma contundente, incluso de instancias jurisdiccionales incompetentes, dando una muestra más de que nuestro Estado de derecho prevaleció y este Tribunal no se vulneró”.