La onda tropical que ha mantenido en alerta a las autoridades y a la población de Yucatán disminuyó su potencial de desarrollo ciclónico, según los últimos reportes de la Coordinación Estatal de Protección Civil.
Aunque continúa su trayectoria se espera que sus efectos se limiten a lluvias propias de la temporada durante el fin de semana. En un comunicado, Protección Civil informó que el sistema se ha debilitado considerablemente en las últimas horas, lo que reduce significativamente el riesgo de formación de un ciclón tropical.
“Si bien mantenemos un monitoreo constante de la evolución de esta onda tropical, las condiciones atmosféricas actuales no favorecen su intensificación”, señaló Enrique Alcocer Basto, director estatal de Protección Civil.
Por otra parte, la Universidad de Colorado, reconocida a nivel mundial por sus pronósticos estacionales de huracanes, ha realizado una leve actualización a la baja en su proyección para la temporada actual.
De acuerdo con el nuevo modelo, se espera la formación de 23 ciclones tropicales, en lugar de los 25 previstos inicialmente.
“Esta disminución en el número de ciclones proyectados no significa que la temporada haya perdido intensidad”, explicó Alcocer Basto. “Se mantiene la expectativa de una temporada activa, con la posibilidad de que algunos sistemas se fortalezcan y alcancen categoría de huracán”, agregó.
Ante esta situación, las autoridades recomiendan a la población mantenerse informada a través de los canales oficiales y tomar las precauciones necesarias para protegerse de las lluvias y posibles inundaciones.
Es fundamental contar con un plan familiar de protección civil, identificar las rutas de evacuación y tener a la mano un botiquín de primeros auxilios.
Asimismo, se recomienda limpiar los patios y azoteas, asegurar objetos que puedan ser arrastrados por el viento y evitar cruzar ríos y arroyos. A pesar de que la amenaza de este sistema tropical haya disminuido, la temporada de huracanes aún no ha llegado a su fin.
Las condiciones climáticas son variables y nuevas perturbaciones pueden surgir en cualquier momento. Por eso, es crucial que cada uno de nosotros seamos responsables y nos preparemos ante cualquier eventualidad.
Mantengamos informados a nuestros seres queridos, verifiquemos nuestros planes de emergencia y aseguremos que nuestros hogares estén listos. Juntos podemos enfrentar los desafíos que nos presente la naturaleza.