Foto: Cortesía

El director de la Asociación Civil Va por la Tierra, Salvador Castell González, advirtió que la contaminación de las playas se está dando por varios frentes: por un lado, los elementos agroquímicos; la basura que dejan los visitantes en estas zonas en temporada de vacaciones o de descanso; y los impactos que dejan las casas ubicadas en la costa. 

Consideró que las comunidades son una herramienta clave para mitigar los impactos de estos contaminantes en los océanos, que son lugares con una gran biodiversidad de especies.

Para el especialista en temas medioambientales, parte de los contaminantes que se encuentran en las aguas de Yucatán son acarreados desde el acuífero y llegan finalmente a los mares, costa o bien en las de agua dulce. 

Estos agentes nocivos incluyen fertilizantes, pesticidas, entre otros. Asimismo, dijo que también se debe tomar en cuenta la contaminación de los usuarios de playa -principalmente basura-, así como los aceites, combustibles y sus derivados que se generan en marinas y puertos o en las propias viviendas de estos puntos de la entidad.

De igual forma, Castell González recordó que la llegada de fertilizantes y demás agroquímicos a las aguas oceánicas ayuda a la proliferación de algas o pasto marino en exceso, fenómeno que cada año es visible en la Península de Yucatán, pero es más evidente en la costa de Quintana Roo

También destacó la presencia de microplásticos en organismos marinos que al final del día terminan en las mesas de cientos de familias yucatecas.

“El problema en los mares y costas, igual que en la contaminación del acuífero, es una serie de pretextos por competencias. Las responsabilidades federales, estatales y municipales se ven cruzadas; si no existe voluntad política y una buena colaboración entre ellas, no habrá mucho avance. Un ejemplo es la ausencia de la ley estatal de aguas”, señaló.

Comentó que, si bien existen programas como el de playas limpias y otras certificaciones que vigilan que las playas estén limpias, estos son más por turismo que por salud.

Opinó que la conservación de los ecosistemas es crucial para poder mantener la proveeduría de servicios y recursos naturales para nuestras poblaciones humanas, por lo que la población que cohabita en los territorios de interés es crucial para mantener los ecosistemas en buen estado, principalmente porque ellos son los que observan de primer contacto y de viva voz los efectos negativos, así como las afectaciones que hay en los ecosistemas.

En cuanto a las acciones afirmativas para abatir este problema, el director de Va por la Tierra dijo que en Yucatán existen proyectos reconocidos a nivel local e internacional como buenos ejemplos del uso sostenible de los ecosistemas para actividades de turismo. 

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