El Congreso de Yucatán aprobó por unanimidad reformar la Constitución estatal para reconocer y proteger los derechos de los artesanos, visibilizando esta milenaria actividad como parte fundamental del patrimonio cultural y económico de la entidad.
La iniciativa, impulsada por la diputada del PRI, Karla Franco Blanco, busca generar las condiciones jurídicas y políticas públicas para el adecuado fomento de la producción artesanal, actividad que representa no sólo un sustento económico para miles de familias yucatecas, sino una expresión invaluable de la identidad, tradiciones y cosmovisión de los pueblos originarios de esta tierra.
“Yucatán se distingue a nivel nacional por su gran riqueza cultural, pero actualmente no existen parámetros que generen políticas certeras e idóneas para potenciar la actividad artesanal”, expresó Franco Blasnco al presentar el dictamen aprobado.
En cada rincón de Yucatán, maestros artesanos crean verdaderas obras de arte con una diversidad de materiales, diseños y colores únicos. Piezas que no solo son funcionales, sino que transmiten la esencia del estado más allá de sus fronteras a través de los turistas nacionales y extranjeros que las adquieren.
Localidades como Valladolid, Izamal, Ticul, Tekit, Kanasín, Tixkokob, Muna y Tecoh son solo algunas de las comunidades emblemáticas por su amplia y reconocida oferta artesanal.
Sin embargo, como señala la legisladora, en ocasiones esta actividad se ha visto únicamente como un sector económico y productivo más, sin la importancia y el lugar que debería ocupar en el marco jurídico de la entidad.
“La artesanía tiene amplia relación con los derechos patrimoniales y culturales de los yucatecos, pues imprimen un valor único a sus creaciones al representar la cultura, origen y tradiciones milenarias en cada pieza”, enfatizó Franco Blanco.
Para Felipa Pech, reconocida artesana de los voluminosos huipiles tradicionales de Yaxcabá, esta reforma constitucional abre una puerta de esperanza.
“Es un primer paso muy importante para que nuestro trabajo sea valorado, apoyado y respetado como se debe, pues somos guardianes de las tradiciones de nuestros ancestros”.
Por su parte, Jorge Matos, director de una casa de artesanías en Mérida, considera que la visibilización de esta actividad en la Constitución sentará las bases para acceder a créditos accesibles, capacitación y comercialización que permitan mejorar las condiciones de vida de los artesanos.
24 Horas Yucatán