Es difícil que pase desapercibida una cinta que promete seducción, intensidad y un drama desenfrenado. Es inaudito dejar a un lado a un director que cimentó la carrera de uno de los actores más talentosos del momento.
Es inexcusable ponerle atención a la siguiente propuesta de un director cuya fascinación por la estética, la intimidad y la tensión sexual nos entrega joyas cinematográficas contemporáneas.
Este jueves estrenó en salas mexicanas Desafiantes (“Challengers” es su título original), de la mano del realizador italiano Luca Guadagnino, que, entre otras exitosas producciones, como una nueva versión de Suspiria y la adaptación de la novela Hasta Los Huesos, nos entregó el clásico moderno Call Me By Your Name. Aquella historia, también adaptada de un libro de ficción, nos llevaba a las villas italianas para relatar el despertar sexual de Elio (Timothée Chalamet) al conocer a Oliver (Armie Hammer), un apuesto americano que poco a poco cautivaría su corazón.
Esta producción de 2017 consolidó a Guadagnino como un director sensacional, así como a su joven actor protagónico, quien obtuvo su primera nominación al Oscar por interpretar a Elio. Tras ello, Timothée ha tenido una carrera en ascenso, con las películas Dune, Mujercitas y Lady Bird de Greta Gerwig, y Wonka, entre muchas otras ya en el bolsillo, y con una cinta biográfica de Bob Dylan que promete explorar su versatilidad como actor y… ¿hasta darle un premio de la Academia? Ya veremos.
Sin embargo, en esta ocasión los reflectores no están en el también protagónico de Hasta Los Huesos, si no en otra actriz que igualmente está dando que hablar por su carisma y talento: Zendaya. La ganadora del Emmy por el papel de Rue en Euphoria, la oscura serie de HBO, sobre una adolescente con problemas de adicción y otros dramas de preparatoria, quien también ha protagonizado las películas de Dune, es la estrella en Desafiantes. En esta ocasión, intercambiamos las villas italianas por las canchas de tenis, en donde Tashi Donaldson (Zendaya), profesional del deporte, se verá envuelta en un triángulo amoroso con otros tenistas: Art (Mike Faist) y Patrick (Josh O’ Connor). De acuerdo a los avances, se nos promete sensualidad, ambigüedad y hasta un aire queer, pese a ser un triángulo amoroso aparentemente heterosexual. Sin embargo, parece ser que está será la puerta de entrada para Zendaya y el mundo cinematográfico independiente, porque aunque ya demostró su versatilidad con Euphoria, Guadagnino podría llevarla a una nominación al Oscar o por lo menos a darle más papeles serios. Habrá que ver cómo le va en el Grand Slam cinematográfico. Estemos atentxs.
El filmfluencer / Santiago Guerra