Mérida pasa por una curva ascendente en su cultura de consumo y venta de café que está redibujando su perfil urbano y cultural. Este aumento no solo refleja un cambio en los hábitos de consumo sino también un mayor interés en la calidad y el origen del café.
Los habitantes de Mérida, contrariando la idea de que el calor disuade el consumo de bebidas calientes, han adoptado con entusiasmo la cultura barista, explorando y disfrutando de diferentes blends y especialidades.
Este fenómeno ha convertido a la capital yucateca en un punto de referencia para los aficionados al café y ha influido notablemente en la vida local, creando un tejido social y económico centrado en torno a esta bebida.
“Mérida está de moda en el mundo, no solo por cuestiones turísticas, sino porque hay una curva de ascenso de conocimiento en consumo y venta de café”, indicó Julio Ruvalcava Cárdenas, organizador de Expo Café Nacional.
Dijo que este tipo de eventos en Mérida apoyan a los productores de café locales, nacionales e internacionales para tener contacto con sus potenciales clientes.
Esta feria reunió a productores de café de siete estados de México y de países como Colombia, ofreciendo una plataforma única para la promoción del café mexicano. La exposición permite a los visitantes degustar y comprar granos de alta calidad, provenientes tanto de regiones locales como internacionales.
A pesar del auge de las cafeterías, Yucatán enfrenta desafíos significativos para el cultivo de café debido a su geografía; principalmente, la falta de áreas con la altitud necesaria para producir granos de calidad superior.
Expuso que si en el Estado intenta cultivar café las condiciones no lo permiten, puesto que se necesita regiones arriba de 800 metros sobre el nivel del mar para así poder producir granos de alta calidad.
Sin embargo, esto no ha detenido la adopción y adaptación de la cultura del café en Mérida. Las cafeterías locales han sabido aprovechar granos importados y de otras regiones mexicanas, creando una oferta diversa y atractiva para todos los paladares.
En la última década, el número de cafeterías en Mérida ha experimentado un crecimiento explosivo, pasando de 88 establecimientos a más de 300.
Además de promover el consumo interno, la Expo Café Nacional también busca posicionar al café mexicano en el mercado global.
Según Ruvalcava, México es actualmente el segundo mayor exportador de café, después del petróleo, a nivel mundial.
“En un mundo tan globalizado, no podemos evitar invitar a cafeteros de otros países para que se sumen a la experiencia de los visitantes y compradores que buscan el producto local”, indicó.
Esta prominencia es el resultado directo de la diversidad agronómica del país, que permite cultivar algunos de los mejores cafés del mundo, compitiendo con gigantes como Colombia, Brasil y Vietnam.
Abundó que son los diferentes tipos de suelo, las condiciones agronómicas del país, las que permiten tener estos granos de primer nivel y que han captado el gusto de las personas que viven en la ciudad de Mérida.
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