Después de Israel y Palestina, México se mantuvo en 2023 como uno de los países más peligrosos para ejercer el periodismo, con el asesinato de cinco reporteros y un promedio de una agresión cada 16 horas contra un periodista, denunció el miércoles la oenegé Artículo 19.
En 2023 se registró un total de “561 agresiones contra la prensa“, lo que en promedio significa que se agredió “cada 16 horas a una persona periodista o medio de comunicación en el marco del ejercicio de su labor“, indicó en un reporte la organización de defensa de libertad de prensa.
Entre los perpetradores “convergen poderes económicos, públicos y criminales“, sostuvo.
La lista de Artículo 19 incluye a Ismael Villagómez, fotoperiodista de El Heraldo de Juárez, asesinado el 16 de noviembre en Chihuahua (norte); Jesús Gutiérrez, de Notiface Prensa Digital, ultimado el 25 de septiembre en Sonora (noroeste); y Nelson Matus Peña, de Lo Real de Guerrero (sur), acribillado el 15 de julio.
También a Luis Martín Sánchez, corresponsal del diario La Jornada en Nayarit (noroeste) y Marco Aurelio Ramírez, de Puebla Independiente (centro), asesinados el 7 de julio y el 23 de mayo, respectivamente.
Las tres categorías de agresiones más documentadas en 2023 fueron “las intimidaciones y hostigamientos; el uso ilegítimo del poder público, principalmente a través de la estigmatización y el acoso judicial, así como las amenazas tanto en la esfera física como digital”.
Se denunciaron además casos de “tortura o tratos crueles, inhumanos y degradantes“, apuntó.
El documento destacó la desaparición del periodista Juan Carlos Hinojosa en Veracruz (este).
“Fuera de Israel y los territorios ocupados de Palestina, con los asesinatos aquí registrados, se seguiría colocando a México como uno de los países más letales para ejercer el periodismo”, denunció la organización.
El informe se difunde a cinco días de que el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador hiciera público en su conferencia matutina el número telefónico de una periodista de The New York Times que publicó un reportaje sobre supuestos vínculos de aliados del mandatario con narcotraficantes.
López Obrador leyó el 23 de febrero el número mientras revelaba un cuestionario que le envió el diario estadounidense para la nota, lo que motivó una investigación en curso de la entidad encargada de la protección de datos.
También desató críticas de organismos de defensa de la libertad de prensa por considerar que el mandatario la estigamizó y puso en riesgo.
Desde el 2000, en México han sido asesinados más de 150 periodistas y la mayoría de estos crímenes siguen impunes, de acuerdo con Reporteros Sin Fronteras.
AFP