Fotografía: Guillermo Castillo

Las ganas, los sueños, la constancia; pero sobre todo la innovación, han llevado a un par de jóvenes mujeres a establecerse en el gusto del público ofreciendo bebidas frías con base de café en el Barrio Mágico de La Ermita. Sus combinaciones son poco comunes, no obstante, conquistan al paladar que busca nuevas experiencias y sabores.

Yanni Espejo junto con su socia y pareja inició su camino en el emprendimiento hace tres años. Para ellas no ha sido fácil, el camino para llegar a un proyecto propio suele ser sinuoso. Hasta hace un año tenían un negocio en otro barrio tradicional, Santiago, sin embargo, al subirles la renta del local tuvieron que despedirse de la zona para buscar nuevos aires, otros clientes, iniciar de nuevo.

“Pusimos todos nuestros ahorros, nuestras ganas, al no tener muchos recursos nosotras mismas hicimos las mesas, las sillas, todo de tarimas de madera. Hubo buena respuesta, pero tuvimos que cambiar de lugar”, compartió Yanni.

La joven emprendedora explicó que Agüita y Coco Café es una propuesta distinta, innovadora que se ha asentado en el parque de la Ermita a unos metros de su distintivo quiosco. Ellas ofrecen café frío combinado con sabores muy particulares que buscan deleitar el gusto de los transeúntes y seguir en la preferencia de sus clientes.

Pese a que puedan parecer poco comunes las combinaciones como naranja, toronja, coco, fresas con crema o mojito con café, la experiencia bien vale pena y no en cualquier lugar se sirven, ya que son infusiones acordes al calor particular de la ciudad de Mérida.

También venden pan artesanal, repostería francesa que puede ser acompañada de un café orgánico que las jóvenes traen desde los altos de Chiapas.

Por el momento se apoyan de las redes sociales para posicionarse. Su paciencia y perseverancia ha logrado que de lunes a viernes de 6 AM a 12 del mediodía y sábados como domingos de 7:30 AM a 12 del mediodía estén en el parque de la Ermita.

Ellas mismas montan su puesto a diario, la barra es de madera, se apoyan de un triciclo y esperan continuar en ese camino que significa sacrificios, pero al mismo tiempo luchar por el sueño propio y no por el de alguien más.

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