En un mundo lleno de ruido y agitación, la música surge como un bálsamo para el alma, una luz que ilumina los momentos oscuros y un refugio ante las adversidades de la vida. Detrás de cada melodía que resuena en nuestra mente y se arraiga en nuestro corazón, se encuentra la magia de los compositores, quienes, con su creatividad e ingenio, dan forma a las emociones y experiencias humanas. 

El 15 de enero de 1945 marcó un hito en la historia musical de México con la fundación de la Sociedad de Autores y Compositores de México (SACM), una entidad dedicada a reconocer los derechos de autor. Aunque la fecha exacta de su creación fue el siete de enero, el quince se estableció como el día oficial para conmemorar y honrar a aquellos artistas dedicados a la composición.

Fue en 1983 cuando, de manera oficial, se instituyó la celebración del Día del Compositor, coincidiendo con la creación del Sindicato Mexicano de Autores, Compositores y Editores de Música (SMACEM). 

FOTO: CUARTOSCURO

En México, la música ha sido una parte integral de la cultura, y el Día del Compositor es una ocasión especial para reconocer y rendir homenaje a aquellos que han contribuido significativamente a la riqueza musical del país.

La nación azteca, con su historia musical arraigada, tiene la distinción de proteger las obras musicales durante 100 años después de la muerte de sus creadores, un testimonio del profundo respeto por la herencia artística. 

Definir a un compositor va más allá de la simple creación de obras musicales. En un contexto poético, un compositor es aquel que inventa música, teje sonidos de manera imaginativa para crear un lenguaje único y tiene la capacidad de comunicarse a través de la música. México cuenta con innumerables figuras destacadas en este arte, como Agustín Lara, Consuelito Velázquez, Cuco Sánchez, José Alfredo Jiménez, Roberto Cantoral y Armando Manzanero, cuyas composiciones han dejado una marca indeleble en la historia musical del país. 

El papel de los compositores va más allá de la mera creatividad artística; también son los dueños y creadores de sus obras. El Instituto Nacional del Derecho de Autor (INDAUTOR), dependencia de la Secretaría de Educación Pública, es la institución encargada de salvaguardar los derechos de autor y promover su conocimiento en la sociedad. Los compositores, como custodios de su obra, registran sus creaciones en esta institución, asegurando así su legado y la posibilidad de obtener beneficios económicos por la explotación comercial de sus obras. 

El cantate y compositor Armando Manzanero murió a los 86 años.

La Ley Federal de Derechos de Autor en México protege diversas cuestiones, desde las ideas en sí mismas hasta los nombres y títulos. Sin embargo, más allá de los derechos patrimoniales, existen los derechos morales, inalienables e imprescriptibles, que permiten al autor determinar la divulgación de su obra, exigir respeto a la misma y oponerse a cualquier acción que cause demérito o perjuicio a su reputación. 

En el Día del Compositor, celebremos la magia de la música y honremos a aquellos cuyas composiciones han sanado almas, han sido refugio en momentos difíciles y han permitido celebrar la vida, el amor y la amistad. Las melodías trascienden la historia y el tiempo, conectando generaciones y tejiendo un tapiz sonoro que perdura en el corazón de quienes las escuchan. 

Leave a comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *