Desde hace dos semanas, miles de trabajadores textiles se han manifestado en Bangladés para exigir mejoras salariales, por lo tanto, las fábricas textiles han permanecido cerradas y han sido saqueadas.
El salario mensual de estos trabajadores es de 8 mil 300 takas (75 dólares), por lo que, exigen que aumente a 23 mil takas (208 dólares). Sin embargo, el comité de salario mínimo para la industria textil de Bangladés lo aumentó este martes a 12 mil 500 takas (113 dólares), una cantidad rechazada de inmediato por los sindicatos.
“El nuevo salario mínimo mensual para los trabajadores de las fábricas de confeccción se fijó en 12 mil 500 takas. Será efectivo a partir de diciembre“, dijo Raisha Afroz, secretaria de este comité designado por el gobierno.
Por su parte, la Federación de Trabajadores Industriales y de la Confección de Bangladesh (BGIWF) rechazó la cantidad por “insuficiente”.
“Es inaceptable, no cumple con nuestras expectativas“, dijo Kalpona Akter, presidenta de la BGIWF, quien cree que el salario mínimo debería aumentarse a al menos 15 mil takas.
Por lo anterior, cientos de trabajadores se manifestaron nuevamente cerca del ministerio de Trabajo en el centro de Daca, la capital.
“Se burlan de los obreros. Es obvio que el gobierno y los propietarios solo han mirado sus propios intereses, ignorando el costo de vida de los trabajadores”, denunció en la manifestación Taslima Akter, una líder sindical.
Cabe resaltar, que Bangladés, detrás de China, es el segundo mayor exportador mundial de prendas de vestir, pues suministra a marcas y distribuidores occidentales, incluidos Gap, Hugo Boss, Adidas, H & M, el grupo Inditex (Zara), Puma o Levi’s.