Luego de que Estados Unidos afirmara que próximamente suministrará a Ucrania con bombas racimo, el presidente ruso, Vladimir Putin, afirmó que el ejército de su país cuenta con una “buena reserva” de este mismo armamento y que sus frentes de guerra podrían utilizarlos si el ejército ucraniano hace lo mismo.
Este tipo de armas han causado controversia debido a que las cargas que dispersan pueden causar muchas víctimas civiles colaterales. No obstante, desde el inicio del conflicto, los soldados ucranianos han acusado al ejército ruso de utilizar estas controvertidas municiones.
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Este domingo, en una entrevista para la televisión rusa, Putin declaró: “En Rusia, hay una buena reserva de bombas de racimo, de diferentes tipos… hasta ahora no las hemos utilizado, aunque en algún momento tuvimos escasez de municiones”.
Sin embargo, afirmó que, en caso de que el ejército ucraniano utilice este tipo de armas contra ellos “nos reservamos el derecho a tomar represalias”.
Cabe destacar que estas armas están prohibidas en gran parte del mundo, particularmente en los países europeos que firmaron el acuerdo de la Convención de Oslo en 2008, mismo que ni Estados Unidos, ni Ucrania ni Rusia han firmado.