El banco UBS anunció ayer que finalizó el proceso legal para la compra de su rival Credit Suisse y lanzará el proceso de integración, una ardua tarea que transcurre bajo la mirada atenta de clientes, empleados, autoridades políticas y reguladores del mercado suizo.
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“Hemos finalizado la compra legal de Credit Suisse“, declaró el mayor banco suizo en una carta abierta publicada en varios periódicos. La nueva entidad afirmó que ahora se abre “un nuevo capítulo histórico”.
UBS, el mayor banco suizo, fue obligado el 19 de marzo a absorber a su rival Credit Suisse para evitar su quiebra, que las autoridades consideraron que podría tener consecuencias catastróficas para el sistema financiero mundial.
La nueva entidad será un megabanco nunca visto en Suiza, algo que inquieta a las autoridades.
En Suiza, debido a la fusión, miles de empleados podrían quedar sin trabajo.
El consejero delegado de UBS, Sergio Ermotti, advirtió el viernes que probablemente los próximos meses sean “agitados”, ya que la integración implica una serie de decisiones difíciles, especialmente en materia de empleo.
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“Ahora UBS puede comenzar a ser proactivo”, explicó la semana pasada Andreas Venditti, analista financiero de Vontobel.