Monumento a la Patria

El Monumento a la Patria en Mérida cumple 67 años de existencia, logrando una relevancia y significado únicos. La obra combina historia y una gran identidad yucateca con la cultura mexicana en general, convirtiéndose en un lugar emblemático de la región.

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En el Paseo de Montejo se encuentra una impresionante figura femenina de 12 metros de altura, con un hipil y sandalias. Es conocida como “La Patria“, y ha sido testigo de una gran variedad de eventos y sucesos. Desde festivales, conciertos y carnaval, hasta manifestaciones, violencia y vandalismo. El lugar ha sido visitado por famosos artistas como Juan Gabriel, Ricky Martin y Juanes, así como por deportistas y turistas. El ambiente puede variar desde gritos de euforia por victorias deportivas o políticas hasta una sensación de tranquilidad.

Diferentes grupos y comunidades se han reunido en Yucatán, incluyendo ambientalistas, defensores del INE, feministas, personas con distintas posturas respecto al aborto, miembros de la comunidad LGBT, convencionistas, novias, quinceañeras, “instagramers” y “vloguers”. La diversidad es uno de los principales rasgos tanto de la región como del país.

En 1956, el artista Rómulo Rozo expresó su intención de eliminar el separatismo yucateco al crear el primer altar a la Patria en Mérida, según una entrevista realizada por Carlos R. Menéndez Navarrete, quien más tarde se convirtió en el tercer director del Diario de Yucatán. Rozo estaba encaramado en los andamios mientras hablaba.

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La imponente obra que es el Monumento a la Patria en Mérida, logra unir lo local y lo nacional. Es una obra trascendente y de gran escala, con pocos monumentos conmemorativos en México que se puedan comparar. Así lo afirma Blanca Esther Paredes Guerrero, coordinadora del Doctorado Interinstitucional en Ciencias del Hábitat de la Facultad de Arquitectura de la UADY y de la Escuela del Hábitat de la Universidad de San Luis Potosí.

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