David Rico
La Comisión de Derechos Humanos del Estado de Yucatán (Codhey) arrancó la supervisión a hospitales de la entidad, por medio del Centro de Supervisión Permanente a Organismos Públicos que, para verificar que los nosocomios cumplan con la debida prestación del servicio.
En total, se visitarán los seis hospitales generales de la entidad, el Materno Infantil y el Psiquiátrico a fin de verificar las condiciones técnico-operativas que presentan dichas Instituciones, así como el trato que reciben pacientes, de igual manera que los usuarios, destacó el presidente del organismo, Miguel Óscar Sabido Santana.
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En la última supervisión del 2021, se detectó que los recursos humanos e insumos son insuficientes, deficiencias en infraestructura, y otras carencias, que impiden brindar un trato digno y adecuado a sus usuarios y a sus propios trabajadores y que el servicio sea eficiente.
Los nosocomios que se visitarán son: Hospital Materno Infantil, General Dr. Agustín O’Horán, Psiquiátrico de Yucatán, así como a los generales de Tekax, Ticul, Peto, Tizimín y Valladolid. Dijo que el objetivo es verificar las condiciones técnico-operativas que presentan, a efecto de que se respete la dignidad de pacientes, así como los derechos humanos de las personas usuarias de los servicios de salud que brinda el estado de Yucatán.
Entre los puntos a evaluar se encuentran el equipamiento recibido por el personal de la institución, las condiciones de mantenimiento del inmueble, la privacidad con la que se proporciona la atención y el tiempo de espera de los pacientes para ser atendidos.
También se supervisarán las condiciones del instrumental, las facilidades con las que cuenta el paciente en caso de ser referido a otro hospital, calidad de servicios, limpieza, entre otros.
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Expuso que los resultados de las supervisiones se darán a conocer en el informe anual de actividades que se presentará el año entrante.
Sin embargo, los resultados de las supervisiones en nosocomios no han sido alentadoras. En el 2021, la Codhey visitó los hospitales en cuestión y se detectaron deficiencias importantes, particularmente en la atención a pacientes con Covid-19.
Entre las principales deficiencias detectadas, el año pasado, se enumeró deficiencia en la infraestructura hospitalaria, exceptuando al Hospital de Tekax, el cual se encontró en buenas condiciones y funcionamiento.
Insuficiencia en el abastecimiento de nuevos equipos, detectando que los equipos existentes están en mal estado o en desuso por falta de piezas de repuesto y necesitan mantenimiento preventivo o correctivo.
La ropa hospitalaria, como sábanas y batas quirúrgicas para médicos y enfermeros, es insuficiente, debido a que no existe un abasto continuo, pudiendo observarse que varias de esas prendas se encuentran desgastadas o rotas por su excesivo uso.
El personal, a decir de los titulares de los nosocomios, resulta insuficiente para todas las áreas, destacando la necesidad de médicos especialistas y enfermeros en todas sus subespecialidades, así como del personal de limpieza.
Se requiere una mayor inversión en medicamentos, pues ante su falta o insuficiencia, muchas de las veces las medicinas recetadas son sustituidas por otras, que no cumplen con la función de las prescritas.
En entrevistas realizadas al personal, manifestaron no recibir capacitación suficiente, por lo que se requiere prestar especial atención sobre todo en temas relacionados con el trato digno y el respeto a los derechos humanos.