La marea roja continúa afectando la pesca ribereña, ya que a causa de esta los hombres de mar no salen a capturar pulpo; los vientos y marejadas fuertes registradas en las últimas horas en el área de Progreso arrastraron a la costa todo lo malo que trae ese fenómeno.
Este fin de semana, debido a las constantes amenazas de lluvia, los pescadores de Progreso optaron por quedarse en tierra, a fin de prevenir posibles accidentes em altamar, pero además las actividades se paralizaron también porque persiste la marea roja y las aguas siguen turbias.
Los pescadores dijeron tener confianza en que las marejadas de estos últimos días arrojen a la playa lo que aún queda del fenómeno marino, por lo estiman que en dos semanas se reanudaría la pesca de pulpo, lo cual ocurriría mes y medio después de que la marea roja invadiera las costas de la entidad.
Asimismo, señalaron que la naturaleza está haciendo su trabajo, ya que las corrientes y marejadas expulsan los desechos marinos a la orilla de la playa, lo que genera la mancha a lo largo del litoral, que se irá limpiando paulatinamente, por lo que mientras más intenso sea el oleaje, más rápido desaparecerá el tinte rojo.