Este domingo, Colombia elige presidente entre el izquierdista Gustavo Petro y el independiente Rodolfo Hernández, dos candidatos ajenos a los partidos con propuestas radicales de cambio para un país en crisis.
El senador y exguerrillero de 62 años ganó la primera vuelta con el 40% de los votos frente al 28% de Hernández (77), pero su ventaja se pulverizó tras el juego de alianzas y una campaña muy agresiva, con filtraciones y golpes bajos de lado y lado.
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Si vence Petro, la izquierda llegará por primera vez al poder y si el triunfo es para Hernández, estará al frente del país un millonario sin partido enredado con la justicia.
«Los colombianos nunca se habían enfrentado a esto, no ir hacia donde el entusiasmo les señala sino hacia aquel que les hará menos daño», señala Michael Shifter, del Diálogo Interamericano.
Alrededor de 29 millones de colombianos están llamados voluntariamente a las urnas desde las 13H00 GMT hasta las 21H00 GMT. La abstención oscila generalmente entre 45 y 50%.