BELÉN MARTÍN
A fin de atender la problemática que preocupa a las comunidades mayas a causa de la actividad porcina en Yucatán, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) informó que establecerá una mesa de trabajo para sentar las bases y determinar acciones concretas con base en la normatividad ambiental.
Abre Semarnat diálogo sobre el tema porcino
De acuerdo con la dependencia federal, en esta reunión interinstitucional participará la Semarnat a través de la Subsecretaría de Fomento y Normatividad Ambiental, la Comisión Nacional del Agua (Conagua), la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y la Secretaría de Desarrollo Sustentable del Estado de Yucatán (SDS).
Lo anterior como parte de los acuerdos firmados entre la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales y el Gobierno del estado y, tras el anuncio oficial de la instalación de la sede nacional de Semarnat en la ciudad de Mérida, por parte de su titular, María Luisa Albores González.
Subieron las ventas de pulque durante pandemia
“Como Gobierno federal venimos aquí a sumar y trabajar con el gobierno de Yucatán para el bienestar de las y los yucatecos”, manifestó.
La dependencia federal reconoce que existe una amplia variedad de sistemas de producción porcícola que generan impactos ambientales por el uso y descarga de aguas residuales, por lo que considera necesario llevar a cabo acciones concretas por parte de los tres órdenes de Gobierno en el ámbito de sus competencias, en materia de protección al ambiente y de preservación y restauración del equilibrio ecológico.
Por ende, las partes crearán un grupo de trabajo para el diseño y la implementación de al menos un “Programa de Intercambio de Información” sobre sus respectivos programas, fuentes de información, datos, registros, controles, bases de datos, entre otros; que en el ejercicio de sus atribuciones cuenten para el cumplimiento de la normatividad ambiental y la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, a fin de garantizar el derecho a un medio ambiente sano, una vida digna, el desarrollo de los pueblos indígenas, así como el derecho al agua y al saneamiento de la misma.